Un espacio curioso donde duermen cada noche cientos de estas aves.
Con solo 7 redes bien dispuestas aguardamos el atardecer expectantes.
Mientras, preparamos el terreno para la jornada nocturna.
Antes de comenzar a trabajar un anillador tiene que alimentarse bien, y que mejor que hacerlo rodeado de buenos amigos en el campo.
La recogida fue menor de lo que nuestro compañero Fernando esperaba, aunque más de 300 aves no dista de ser un buen número.
Con varios anillando, otros sacando aves, otro apuntando, aquello fue una cadena de montaje bien engrasada que hizo que se nos pasara el tiempo "volao".
Con varios anillando, otros sacando aves, otro apuntando, aquello fue una cadena de montaje bien engrasada que hizo que se nos pasara el tiempo "volao".
Al finalizar pudimos relajarnos y evaluar la jornada, que fue bastante productiva. El anillamiento nos dejó 352 aves y 12 controles. Una de las aves capturadas fue un Híbrido de golondrina común x Avión común (Hirundo rustica x Delichon urbica), el primero de este año en el grupo.
Dar las gracias a nuestro compañero Fernando por la invitación y el buen rato que pasamos. Cuando se producen eventos de este tipo hay que aprovecharlos, no solo por el placer de anillar aves, sino también por la estupenda compañía.
Podéis ver la crónica completa de la jornada en su blog http://birdringal-andalus.blogspot.com/
No hay comentarios :
Publicar un comentario